Se ha demostrado que el fentanilo es hasta 50 veces más fuerte que la heroína y 100 veces más que la morfina.
Por esta razón, la dependencia al fentanilo es casi inmediata.
El fentanilo también se utiliza para adulterar otro tipo de drogas, como la cocaína o la metanfetamina;
Y no puede ser detectado a simple vista. Por eso, el consumo de cualquier sustancia ilícita es aún más peligroso.
Dar a conocer el grave daño que causa el fentanilo a la salud de quienes lo consumen en México.
El fentanilo es una droga analgésica que se usa para disminuir el dolor; puede causar graves problemas a la salud y muerte por sobredosis. En años recientes, su uso ilícito se ha extendido, principalmente, en el norte del país, donde su fabricación y tráfico han contribuido al aumento de la violencia en esa región.
Existen dos tipos de fentanilo: El fentanilo de uso médico y el fentanilo ilícito.
Los médicos lo recetan a pacientes con cáncer terminal para tratar los dolores crónicos o a personas que se realizan operaciones quirúrgicas.
El fentanilo ilícito es una sustancia de abuso producida en laboratorios clandestinos. Los residuos tóxicos de su fabricación provocan daños en la salud de la población que habita cerca de esos laboratorios. Así también, la competencia por el dominio del mercado genera entornos violentos que afectan la seguridad de los sitios donde se produce y trafica.
Las principales formas de consumo de esta sustancia son por vía oral, fumado e inyectado; estas últimas dos son las de mayor riesgo. Desde 2016 el fentanilo ilícito se distribuye en diferentes presentaciones: • polvo blanco • gotas vertidas sobre papel secante • pequeñas golosinas • goteros para los ojos • vaporizadores nasales • pastillas como analgésicos recetados • pastillas de colores con el sello “M30”
Se emplea como tratamiento terapéutico del dolor crónico, pero de manera ilícita se toma para tener una sensación de relajación que suele durar entre tres y cinco horas. El abuso en el consumo de esta sustancia provoca los siguientes efectos:
Para conocer más
Arronte Fundación-Centros de Integración Juvenil A. C.,
Lo que hay que saber sobre drogas, México, 2018,
https://bit.ly/3SKVx46
• Estado de aletargamiento, adormecimiento. • Sensación de sopor, ensoñación, sueño profundo. • En el caso de una sobredosis se reducen las funciones vitales como la respiración y el pulso cardiaco, hasta llegar a la muerte.
• Sedación, placer. • Pérdida del interés en las actividades cotidianas y en la convivencia interpersonal. • Estado de aislamiento. • Pérdida de la conciencia.
Al detener su consumo, se produce un fuerte estado de abstinencia que se manifiesta con la dificultad para conciliar el sueño, irritabilidad, episodios de ansiedad por el deseo de volver a consumir y episodios de depresión. Los principales síntomas físicos son escalofríos, diarrea, náuseas, vómito, dolor muscular, dolor de huesos, calambres, sudoración excesiva, malestar estomacal, debilidad y fatiga.
Los síntomas de necesidad y falta de la droga (abstinencia) inician en cuanto se suspende el consumo y se pueden prolongar por varios días después de la última dosis. Se presentan con mayor fuerza de acuerdo con la frecuencia de consumo y a la cantidad de fentanilo acumulado en el organismo: a mayor dosis y mayor frecuencia, más fuerte es el deseo de seguir consumiendo. Aunque es posible que los síntomas físicos se reduzcan después de un par de semanas sin el consumo, los psicológicos aún se mantendrán.
• Descoordinación de las extremidades del cuerpo, como la falla al caminar o el movimiento de un solo lado del cuerpo. • Alteraciones musculares, es decir, contracciones involuntarias o alteraciones del equilibrio y disminución de la fuerza. • Problemas en la pronunciación y articulación e incoherencias al hablar. • Alteraciones del sueño, pérdida de la memoria y del apetito. • Trastornos en la salud mental: ansiedad y depresión. • Problemas cardiacos.
La adicción o dependencia al fentanilo se desarrolla con gran facilidad pues la persona que consume buscará evitar los síntomas ocasionados por la abstinencia.
El fentanilo se mezcla con otro tipo de sustancias ilícitas, como la cocaína o la metanfetamina, con el fin de aumentar sus efectos y disminuir los costos de producción. Como adulterante, no puede ser detectado a simple vista, pues no tiene un sabor ni olor característicos, eso impide conocer si está presente en estas sustancias. Por lo anterior, el consumo de cualquier sustancia ilícita es aún más peligroso.
• Actualmente, el fentanilo es la droga más potente y adictiva
del mercado ilícito.
• Se comercializa en diversas modalidades que facilitan su
adquisición.
• No sólo tiene impacto irreversible en la salud de las personas,
sino que afecta a las comunidades al aumentar la
violencia.